TATUAJES MARINEROS


El origen marinero de los tatuajes old school se remonta a la era de las expediciones marítimas comerciales de la expoliación colonial que los grandes imperios europeos perpretaban en ultramar.
Del contacto de sus tripulaciones y los nativos de esas colonias, que cultivaban el arte de tatuar desde tiempos inmemoriables, se importa a europa la cultura de marcarse la piel, adaptandose al contexto marinero, en recuerdo de la duras y arriesgadas vivencias experimentadas a bordo en sus largas singladuras lejos de casa. Al llegar a europa através de la marina mercante, el tatuaje se convierte además en objeto de explotación en el ambiente circense, por su connotación exótica. El sociólogo Michael Atkinson enmarca esta época entre 1880 y 1920 (...) Este momento estuvo completamente influenciado por la exhibición en Occidente de los cuerpos tatuados maoríes como atracciones de feria, exotismo indispensable en los espectáculos circenses a principios del siglo XIX que causó simultáneamente fascinación y repulsión. 
Uno de los primeros europeos en tatuarse el cuerpo y exhibirse voluntariamente fue el marino Jean Baptiste Cabris, nacido en Burdeos en 1780. Según su relato, había sido rescatado por los habitantes de las islas Marquesas después del hundimiento de su barco; convivió con ellos e incluso adoptó su lengua y costumbres, entre ellas el hábito de tatuarse el cuerpo.  En el ámbito del espectáculo circense norteamericano, el primer hombre en exibhirse con el cuerpo tatuado fue James F.O'Connell, un irlandés que había regresado de las islas de Micronesia en 1835.
Con el tiempo llega a ser parte esencial de la cultura del hampa, siendo en algunos casos auténticos códigos encriptados del entorno criminal y penitenciario.
Por el año 1899 el británico Alfred Charles Smith confeccionó la maquina de doble bobina, y en 1929 el norteamericano Percy Waters patentó la maquina con dos bobinas conectadas a un dispositivo vibrador.

Al avance tecnológico se sumó el diseño en serie de los tatuajes que contribuyó al furor de la práctica en las primeras décadas del siglo XX. 
En la evolución de los diseños de los tatuajes, y del tatuaje de raíces marineras en concreto, fué Norman Collins alias Sailor Jerry quién mejor la representó, al desarrollar un nuevo estilo, fusionando  el estilo y técnica del tatuaje tradicional japonés -que él había aprendido en sus numerosos viajes estando en la marina- con los diseños y el procedimiento del tatuaje ejecutado en Norteamérica en los años 50.

El tatuador norteamericano Ed Hardy  sentía una profunda admiración por Jerry Collins y también estaba empeñado en propocionar a la práctica del tatuaje mayor difusión, organizando en 1976 la primera convención internacional. 
La marginalidad ha sido una constante en la cultura del tatuaje, hasta que los prejuicios de antaño han sido "superados", en un contexto de consumismo exacerbado, por el capitalismo avanzado en el que vivimos. 

Sobre historia del tatuaje, su implicación sociológica y su condición artística es de interés el libro; 
LA PIEL COMO SUPERFÍCIE SIMBÓLICA 
de Sandra Martínez Rossi.













Los tatuajes old school y los neotradicionales inspirados en ellos, y entre ellos especialmente los de temática marinera, estàn hoy de actualidad ya sea por su condición de imagen estereotipada o por una valoración puramente estética. Los motivos de esta actualidad nos podrían hacer reflexionar sobre la influencia que esa imagen idilica, que representan los tatuajes marineros, ejercen aún hoy en día, a pesar de la lejanía en el tiempo ( pues esteticamente estan inspirados en los tatuajes añejos), y en el espacio ( pues rara vez el/la tatuad@ está relacionado con el mundo marinero).














Un artículo interesante sobre las raízes marineras del tatuaje moderno, en;  HELLO SAILOR!

Sobre el tatuaje marinero;
 SUTURAS de TINTA

Para más info sobre TATTOOS, visita la WEB;








No hay comentarios:

Publicar un comentario